SAMUR

Sabado, una calle de Madrid, un terrible accidente entre un coche y una moto, la magnitud del impacto hacia pensar que el desdichado motorista ponia fin a su aficion en ese lugar, por suerte ese dia el destino no quiso que asi fuera y le puso rapidamente en manos de unos grandisimos profesionales del SAMUR , ahora aunque grave, se recupera de sus lesiones, no se mas de el y como terminara su desagradable episodio, pero en esos minutos esos angeles vestidos de amarillo se hicieron con el.



Es una suerte contar con un servicio asi, impuestos bien empleados .